Español
En una Misa con los estudiantes de la Academia San Juan Diego, le pregunté a uno de los niños, “¿Cómo me llamo? ¿Qué es mi nombre?” Me contestó: “Padre Esteban.” Le dije, “Ahora sabes por qué yo tenía que ser sacerdote, porque mis papás me nombraron ‘Padre Esteban.’”
Todos tenemos varios nombres, y cada nombre refleja la relación entre dos personas. Para ese niño, como para muchos, soy “Padre Esteban,” el sacerdote, el párroco. Mis hermanos no me llaman “Padre.” Me llaman por mi nombre porque para ellos soy hermano. Mis hijos me llaman “padre,” pero en otro sentido. Mis nietos me llaman abuelo’ mis ahijados, padrino.
Todos tenemos varios “nombres,” y el nombre refleja la relación que esta persona tiene con nosotros.
La primera lectura de hoy habló tres veces del nombre de Jesús, y en el evangelio Jesús se da el nombre del “Buen Pastor.” En el Nuevo Testamento hay 53 nombres de Jesús. ¿Qué es lo que estos nombres nos pueden enseñar de Jesús y de nuestra relación con él? Cada nombre revela otro aspecto de esta relación, y es bueno meditar sobre los varios nombres de Jesús. Consideremos unos pocos de estos nombres.
Buen Pastor: Un pastor guía a sus ovejas, las conduce a praderas para comer, y en el caso del Buen Pastor, hasta da su vida para protegerlas. ¿Entendemos la profundidad del amor de uno que daría la vida por nosotros?
Piedra angular: Todo el edificio se construye por encima de la piedra angular. ¿Construimos nuestras vidas sobre esta piedra? ¿Formamos nuestras vidas, valores, y acciones sobre esta base?
Luz del mundo: La luz ilumina, nos ayuda a caminar y trabajar sin tropezar—y sin miedo. Que Jesús es la luz quiere decir que yo no soy la luz.
Maestro: Si Jesús es maestro, nosotros somos estudiantes. Él sabe más que nosotros, es más sabio que nosotros. ¿Aprendemos de él o pensamos que nuestra manera es mejor?
Hijo de Dios: Jesús es la presencia de Dios entre nosotros. No es cualquier otro ser humano. Tiene aprobación divina, y por eso podemos confiar en sus enseñanzas y ejemplo.
Hijo del Hombre: Jesús es uno de nosotros. Ha sido probado igual que nosotros. Entiende nuestra condición humana. Comparte nuestro sufrimiento y hasta nuestra muerte. Él nos entiende y por eso nos tiene misericordia.
Como digo, éstos son unos pocos de los nombres de Jesús, pero en cualquier, cada uno, y todos los 53 nombres de Jesús, tenemos el perdón, la vida, y la salvación.
English
At a recent Mass with the students of San Juan Diego Academy, I asked one of the students what my name is. He answered, “Father Steve.” I said, “Now you know why I became a priest. Because my parents named me ‘Father’ Steve!”
We all have many names. Some names are really titles—like “Father” Steve—but they become like names, and each name reflects the relationship we have with the person who calls us by that name. For that student, as for many others, I am “Father Steve,” a priest. My bothers and sisters don’t call me “Father.” For them I am a brother, and they call me by my given name. My children call me “father” (actually, “Pop”), but with a different meaning. My granddaughters call me “Poppa,” my grandsons call me “Grandpa,” and my godchildren call me “padrino” [Spanish for godfather].
We all have this variety of “names,” and the different names reflect the different relationships we have with different people.
Today’s first reading spoke of the name of Jesus three times, and in the in the gospel Jesus gives himself the name of “Good Shepherd.” There are 53 “names” of Jesus in the New Testament! What do those names reveal to us about who Jesus is and about our relationship with him? Let’s consider just a few of them.
Good Shepherd: Shepherds lead their sheep, bring them to pasture to eat, protect them, and in the case of the Good Shepherd, even lays down his life for them. Do we understand the depth of that love that God has for us?
Cornerstone: An entire building is constructed on the base of the cornerstone. Do we build our lives, form our values, model our actions on this foundation?
Light of the world: Light illumines. It enables us to walk and work with ease and without fear. And if Jesus is the light, then we are not.
Teacher: If Jesus is the teacher, then we are the students. Jesus knows more than we do; Jesus is wiser than we are. Are we good students or do we think we know more and that our way is better?
Son of God: Jesus is God among us. He is not just another human being. We can trust his life, his teaching, and his example because they have divine approval.
Son of Man: Jesus is also one of us. He was tested in every way that we are, he shares our sufferings, he even shared our death. He understands us, and so he has mercy on us.
Those are only a few of the names of Jesus, but by any, each, and all of the 53 names of Jesus, we have forgiveness, life, and salvation.